Los dolores cervicales, de hombros y espalda son habituales. No solo tiene que ver con las malas posturas, sino con otros hábitos cotidianos a los que no le prestas atención. ¡Toma nota!
Al hacer las compras: reparte el peso en diferentes bolsas de manera que el peso quede equilibrado a cada lado y puedas mantener la columna recta y no levantar un hombro más que otro.
Pausa con las pantallas: sea computadora, tablet o teléfono celular, o incluso tu televisor, ¡haz pausas! Hay que pensar que, aproximadamente, la cabeza representa el 9% del peso total del cuerpo con lo que, si no adoptamos una buena postura, los músculos del cuello, hombros y espalda se irán tensionando cada vez más.
Evita forzar posturas: cualquier tipo de trabajo que se realice con los brazos requiere hacer fuerza con los músculos de la espalda. Si, además, implica una postura forzada habrá más probabilidad de que aparezcan contracturas. Lo mejor es hacer pausas en el trabajo que permitan relajar los músculos.
